En categoría femenina nuestra campeona Amada Sánchez fue segunda con un gran registro de 1h23m47s nuestra atleta se desplazará a Camargo el próximo 16 de abril para disputar el campeonato de España de 10 km en ruta. Lucía Funes fue 7º de la general y 5º senior con su mejor marca 1h33m12s en una sensacional carrera.
En categoría masculina Nacho Martín demostró su gran momento de forma con una grandísima marca de 1h09m37s a tan sólo 2 segundos de su mejor registro y logrando un magnifico tercer puesto de la general y 2º en M-35. Luis Fernandez volvió a realizar una gran media esta vez en tierras insulares, tirando mucho tiempo de un numeroso segundo grupo en carrera para acabar 5º y 3º M-35 con una gran marca de 1h12m30s. Juan José Cruz entró el 12º y 5º M-35 corriendo por detrás del grupo perseguidor con 1h14m24s. Ayoze Pérez que acompañó al segundo grupo hasta el km 11 sufrió en la segunda parte para finalizar la prueba finalmente fue el 18º y 8º senior con 1h18m24s. Carlos Alberto Delgado fue el 25º con 1h20m15s. Gustavo Israel López debutó con nuestro club logrando el 185º y 30º en M-40 con 1h38m31s. Nuestros maratonianos Miguel Abreu, Antonio Blanco y Juan Martín disputaron la prueba como test para MAPOMA donde le deseamos la mejor de las suertes.
En la carrera de 10,8 km vicoria para nuestro atleta José Antonio García con un tiempo de 36m53s, 8º el güímarero Pedro Lorenzo Díaz con 40m00s y completó la actuación pistacho Thais Rodríguez 7ª con 55m42s.
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CRÓNICA DE AMADA SÁNCHEZ
CRONICA “MEDIA MARATÓN LAS GALLETAS 2011”
Como cada año, y ya van 15, la localidad sureña de Las Galletas celebra su media maratón y los que allí nos congregamos para participar en ella estamos dispuestos a sudar la gota gorda en un circuito que sin dejar de ser un poquito exigente, casi siempre depara buenos registros a los que llegan en forma a la línea de salida. Ante todo felicitar a todos los atletas del Trivalle que se presentaron en la salida dispuestos a desafiar a las inclemencias temporales y buscar su objetivo personal. Por mi parte, como tantos otros, llegué a Las Galletas con algo de tiempo para cambiarme y rodar un poco en busca de sensaciones antes de ponerme en la línea de salida. Todavía estaba buscando las sensaciones cuando me ví debajo del arco de salida y oigo al juez árbitro que pide a algunos participantes que dejen un espacio por el lado derecho para las chicas, pero no hay forma y mira que Ramón (juez árbitro) impone con su voz y envergadura. Todo son protestas por parte de los implicados que no querían moverse y las chicas a buscarse un hueco donde puedan, ni que fuéramos invisibles. Creo que todos sabemos quienes son y que sólo se ponen ahí para la foto, porque luego los que estamos detrás venga a sortearlos para evitar terminar con nuestros huesos en el suelo sin apenas empezar a sudar. Así que una vez dan la salida, la serpiente multicolor empieza a desplazarse por éste circuito al que daremos 2 vueltas. Hasta el km 7 el cielo estaba cubierto y yo sorprendida porque no había sol, pero nada más pensarlo empieza a dar un poco el aire y se lleva las nubes por lo que nuestro amigo Lorenzo (nombre cariñoso dado al sol) ya puede empezar a calentar nuestras cabezas sin compasión alguna. Mi primera vuelta la hago acompañada en un grupito, pero al pasar por la meta el grupo se rompe y al empezar de nuevo a subir me veo sóla unos instantes. ¡Qué dura es la primera parte de la subida en la segunda vuelta! Ahí andaba yo pensando en no perder demasiado cuando llega hasta mí Victor Teni que venía remontando posiciones desde atrás. Como es un buen compañero me dijo “venga engánchate y subimos la parte dura acompañados”, o algo así interpreté yo, porque tampoco estaba para preguntarle detalles. Como se podrán imaginar ante ésta invitación no podía hacer ascos y me dije ” hasta que lleve la lengua por fuera tengo que aguantar pues hasta el km 18 queda mucho y muy duro todavía”. Pues a resoplar y echar kilómetros para atrás y cuando el circuito se vuelve un poco más llevadero tirar piernas para delante, total para meta ya no queda nada. Al cruzar meta agradecer a Víctor su ayuda y nada más pararme venga a sudar la gota gorda. Una vez cambiada la indumentaria de guerra venga a saludar y preguntar a la gente que qué tal ha ido y más de uno seguro pensando ya en el próximo año a ver si puedo mejorar éste o aquél detalle y bajar el tiempo empleado e dar las dos vueltas. Esto fue todo y después a comer pescadito con Javi y Juan, que fueron mis compañeros de viaje hacia tierras sureñas.
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